plagio # 41
En la eterna y aburrida guerra de los sexos- en la que a pesar de todo nunca nos cansamos de luchar-, llega un momento en el que el hombre es el más fuerte porque ya no lo atormenta el deseo como antes, no lo empuja a dar pasos en falso. Ya no es su cuerpo el que manda, es él quien manda en su cuerpo. Y las mujeres se dan cuenta, lo huelen en el aire como los animales salvajes huelen al cazador. Nosotras sólo somos dominantes mientras podemos hacer sufrir a los hombres. Mientras podemos enredarlos con nuestro poder y volverlos locos con nuestro continuo y astuto toma y daca, saciándolos primero y luego poniéndolos a dieta... y mientras vosotros gritáis, escribís cartas o nos amenazáis, nosotras nos sentimos tranquilas y satisfechas, porque aún tenemos poder sobre vosotros.
2 Comments:
escríbame a c_farba@hotmail.com y buscaremos mojón y hora adecuada para el encuentro del maestro (osea usté) y el viejo aprendiz (osea yo),
deberías retomar el blog. ¿no crees? so lazy you jajajaja
de paso promocionar el negocio amore
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