Absent friends

Lo cotidiano es hacerlo todo solo. Perder el tiempo en planes que no planean mas allá del plano mental. Hacer lo justo para mantenerse a flote. Nunca pensar en las consecuencias, vivir al día. Pero toda esta supuesta estabilidad se rompe de repente cuando algo incontrolable te invade. Puede ser una enfermedad, puede ser un sentimiento o pueden ser unas facturas imposibles de facturar con el saldo existente. La cuestión es que el maldito equilibrio se hace añicos y te cortas por todas partes derramando soledad, esperando que alguien corte la hemorragia.

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